Qué significa que el cerebro funcione en red

En el laboratorio donde hice el doctorado alguien dijo una vez ‘se me ha caído la médula al suelo’, a lo que alguien contestó ‘pues espero que no sea la tuya’. Esta era la dulce locura que se vivía en el grupo de Redes Corticales, allá por el año 2012.

Pero otra cosa que me quedó grabada con igual intensidad fue el descubrimiento de que en el cerebro, los procesos se dan por el trabajo conjunto de sus distintas zonas. Veamos cómo.


Áreas del cerebro

Para entender que el cerebro funciona a través de redes que se activan o se desactivan, primero hay que entender que en el cerebro existen áreas, que tienen funciones específicas. Esto quiere decir que cada parte del cerebro tiene una función concreta, pero ninguna de ellas puede ejercer su función sin que reciba la entrada y dé salida a la información hacia otras áreas.

Aquí dejo una imagen de las distintas áreas que hay en la corteza cerebral, en la parte externa del cerebro. En ella podemos ver, por ejemplo, que las áreas visuales están en la parte trasera, las auditivas pegadas a las anteriores y en las zonas cercanas a las orejas, más hacia adelante las áreas somatosensoriales –con funciones de los receptores del tacto–, después las motoras –donde se conectan las terminales de los nervios que nos permiten movernos–, y, finalmente, al frente del barco, la corteza frontal. Ahí se computan todos los cálculos de las otras cortezas para que el cerebro tome decisiones y es donde reside la memoria a corto plazo, entre otras funciones que llamamos ‘de alto orden’. Son áreas que se dedican a procesar información cuando somos conscientes de ello.


Tomada de Freepik, hecha por macrovector


Por debajo de la corteza también hay una multitud de áreas, que forman parte del llamado cerebro límbico, como el hipocampo, la amígdala, el estriado, entre otras. Más hacia la base del cerebro, en el llamado ‘cerebro reptiliano’, se encuentran áreas que tienen funciones de supervivencia, como controlar el latido del corazón, el hambre y la saciedad, el inicio y fin del ciclo del sueño, o el filtro de la información de los sentidos que le llega a la corteza. Algunas de estas áreas son el tálamo y el hipotálamo.



Redes del cerebro

Muchas de estas áreas del cerebro están conectadas entre ellas. ¿Por qué? Porque para que se dé un comportamiento o reacción por nuestra parte al procesar información, deben trabajar conjuntamente. Y no solo eso, lo hacen en los dos hemisferios a la vez, contrariamente a lo que se piensa a menudo.



Este es el concepto de red cerebral o red cortical. Vamos a poner un ejemplo visual: digamos que se acerca un meteorito directamente a mi cabeza del tamaño de una nuez. No es muy grande, pero si no me aparto, con la velocidad que lleva, me va a dejar más chafado una lata de refresco al pisarla. Primero tendré que verla, lo que hará que la información de los impulsos visuales que impactan en mis ojos se filtre en el tálamo (área 1), vayan a la corteza visual (área 2), se procesen en la corteza frontal (área 3) y esta envíe información a la corteza motora (área 4). Yo tomaré entonces la decisión consciente de moverme tres metros hacia el lado para observar cómo el meteorito agujerea el suelo, y no mi cráneo.



El mito de la lateralización del cerebro

Seguramente muchos de ustedes habrán oído que un lado del cerebro se encarga de unas funciones más creativas y el otro más a las intelectuales, o algo parecido, ¿verdad? Este modelo del cerebro apareció en un libro escrito en 1967 por Roger Sperry y Michael Gazzaniga, y les valió el premio Nobel en 1982. En ese momento supuso un conocimiento que convenció a la comunidad científica y un gran avance en el estudio de la neuropsicología. Pero como la naturaleza de la ciencia es cambiante, las evidencias del estudio de la neurociencia apuntaron más adelante que esto era distinto. La teoría que está hoy en día establecida es la de que el cerebro funciona a través de redes interconectadas en los dos hemisferios.

Volviendo al ejemplo –un tanto extraño también– del meteorito, la decisión de moverme hacia el lado ocurre en los dos hemisferios a la vez, de manera bilateral.



Un ejemplo de red poco conocida: la Red Neuronal por Defecto

Es una traducción del inglés de Default Mode Network. Esta red trabaja conectada en sus áreas cuando el cerebro está procesando información interna, es decir, cuando miramos hacia dentro de nosotros mismos. Por ejemplo, ocurre en el caso de la meditación, o mientras pensamos para nuestros adentros.

Aquí os dejo una imagen que ilustra dónde se encuentra esta red en nuestros cerebros. Se trata de distintas evidencias de técnicas como la tomografía de emisión de positrones o la resonancia magnética funcional que muestran dónde están ubicadas las áreas de la RND.

Tomado de Menon, 2023 (ver webgrafía)



Muchos investigadores han relacionado la actividad de esta red a diferentes patologías cerebrales. Quizá podría pasar que manipular o entrenar esta red supusiera una mejoría para algunas enfermedades.

La meditación es la manera más natural de entrenarla y manipularla. Practicar meditación tres días a la semana durante veinte minutos se ha visto que tiene efectos en la presión sanguínea, ansiedad y mejora de las capacidades intelectuales. Y todo ello podría ser mediado por esta red de alguna manera que todavía se desconoce.

Se desconoce tanto como el origen del ejemplo del meteorito para ilustrar la red visuomotora, que todavía me preocupa mientras acabo de escribir esto.

Saludos.

Una pequeña webgrafía

Neural synchrony in cortical networks: history, concept and current status. PJ Uhlhaas et al, 2009. Frontiers in Integratine Neuroscience

20 years of the default mode network: A review and synthesis V Menon, 2023. Neuron

Mindfulness meditation improves cognition: Evidence of brief mental training F Zeidan et al, 2010. Consciousness and Cognition

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Un nuevo tipo de plasticidad dinámica en ‘place cells’